Revista Latinoamericana de Difusión Científica
Volumen 6 – Número 10 – Enero/Junio 2024 - ISSN 2711-0494
P. García Fernández//El coleccionismo de objetos orientales por parte de las mujeres...107-134
animales, así como motivos geométricos en los marcos (Kawamura, 2013: 260). En
cuanto a la decoración representada en las lacas Namban, no era japonesa de
contenido, es decir, no seguía las constantes básicas del estilo japonés, que
comprendía fondos amplios, asimetrías, motivos aislados. La decoración Namban
seguía criterios estéticos occidentales, con influencias de la taracea mudéjar. A pesar
de ello, se utilizaban motivos florales, propios de la estética japonesa, junto con otros
elementos propios de otras culturas asiáticas, como animales fantásticos y pájaros y,
rara vez, alguna escena de caza de carácter europeo (Aguiló Alonso, 1998: 165-167).
Las arcas destinadas a la exportación europea llevaban tapas en forma de medio
cañón, las cuales eran desconocidas en la cultura japonesa (Kawamura, 2013: 255-
2
66). Además, a las lacas namban se les realizaban añadiduras metálicas, al gusto
europeo. La mayoría de las guarniciones metálicas con piedras semipreciosas que
recibieron las piezas fueron de producción occidental, mayoritariamente novohispanas
(Kawamura, 2013: 289).
4.2.3. Porcelanas chinas
En cuanto a la porcelana china, su pasta estaba compuesta de caolín y feldespato,
materiales que le conferían cualidades muy valoradas como su blancura, translucidez,
impermeabilidad, sonoridad y dureza. El caolín es un componente esencial para la
porcelana porque es muy resistente a las altas temperaturas, que son necesarias para
que se produzca la vitrificación. La porcelana de la dinastía Ming fue muy coleccionada
en Europa, debido a su armonioso nivel técnico, formal y decorativo (García-
Ormaechea, 2003: 232-239). Durante el periodo Ming, se fabricaron porcelanas
blancas con dibujos en azul cobalto llamada ch’inh-hua y también la wu-ts’ai, las cuales
eran porcelanas pintadas enrojo, azul, verde, amarillo y negro (Kitaura, 1991: 347).
En China existían las cerámicas de pasta dura o compacta, donde se incluyen el
gres y la porcelana. El gres se cocía a altas temperaturas que lo hacía impermeable al
vitrificase, como ocurría con la porcelana, con la que compartía ausencia de porosidad,
similar dureza y sonoridad. Sin embargo, ambos se diferenciaban en que el gres no
tenía ni la blancura ni traslucidez de la porcelana, a pesar de que presentaba un
aspecto similar porque recibía una capa blanca que se vitrificaba en la cocción. Estas
dos ramas de la producción cerámica china llegaron a Occidente, pero no fueron
diferenciadas y ambas fueron llamadas “porcelanas” en la documentación. Las vajillas
chinas con decoración en azul cobalto fueron muy apreciadas. Durante el periodo
1
18